La agenda económica conserva un alto grado de dispersión temática. El diario salmón privilegia la voz de la CGT “oficial”. Asoma también un pedido opositor para discutir Ganancias.
De la mano de El Cronista, el “Pacto Social” que busca el Gobierno entre empresarios y sindicalistas conserva todavía destacada visibilidad en una agenda económica por demás dispersa. En esta ocasión, irrumpen con fuerza las palabras del titular de la CGT “oficialista”, Antonio Caló, quien rechazó un posible acuerdo para contener los aumentos de sueldo. A su vez, “la oposición” y la CGT de Moyano entran a escena al confirmar que enviarán una carta a la presidenta Cristina Kirchner para que convoque al Congreso a sesiones extraordinarias para modificar el mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias.
Desde lo más alto de su portada, El Cronista jerarquiza el rechazo de la CGT “oficial” al acuerdo para “ponerle techo a los salarios”. En la página 2, el dúo periodístico Elizabeth Peger y Esteban Rafele acentúan las palabras de Caló, quien afirmó: “‘mientras yo esté al frente de la CGT no le vamos a marcar la cancha a nadie’”. Subrayan que el metalúrgico pidió además “‘gestos concretos’” al oficialismo sobre una mejora en las asignaciones familiares y de Ganancias. En la página 10, el diario salmón privilegia además una “nueva señal de unidad” en “la oposición” política, que junto a miembros de la CGT “opositora”, presentar un pedido para que “el Congreso trabaje en verano”.
Entre las páginas 10 y 11, Ámbito prioriza el reclamo del “dream tema anti-K” para que la Presidenta convoca a sesiones extraordinarias en el Congreso. Entiende que se trata de un “contracumbre político-sindical” en respuesta a la reunión de este lunes que mantuvo el secretario Guillermo Moreno con Antonio Caló y miembros de la UIA. Sin embargo, el diario financiero advierte que “no es el primer intento opositor por modificar el piso” de Ganancias.
Clarín apenas dedica el pie de la plana 18 al pedido opositor para “debatir Ganancias en extraordinarias”. La Nación, en cambio, prioriza la voz del metalúrgico Antonio Caló, quien “negó un acuerdo salarial” y se diferenció de Moyano al “bajar las pretensiones sindicales sobre futuros beneficios salariales e impositivos”, porque reclamó, “antes que nada”, “‘conservar’” el empleo.
La mayoría de los diarios porteños dan cuenta hoy del debut en “el mercado” local de los bonos de YPF para los “pequeños ahorristas”. Aunque con matices, Clarín, La Nación, Página/12 y Ámbito Financiero subrayan la “buena demanda” de los títulos de la petrolera.
En Ámbito, María Iglesia remarca el “gran interés entre el público en general” por los bonos de YPF, que le dan “pelea a plazos fijos” porque ofrecen una tasa de interés “del 14,5%”, en contra del “19%” de la petrolera estatal. Entiende, además, que entre “los hechos positivos es que quien lo lleva a cabo es una de las principales empresas del país (…) respaldada por el Estado”.
En la sección “Negocios & Mercados” de Clarín, Marcela Pagano acentúa que “YPF logró colocar en un día toda la emisión para ahorristas”. No obstante, la periodista explica las razones de la alta demanda: la “artillería para publicitar sus nuevos bonos” –sobretodo en el programa “Fútbol para Todos”; más la “necesidad de la gente de ganarle a la inflación”.
La Nación, a contramano de sus colegas, privilegia una “Pelea entre YPF y sus estaciones de servicio” y Pablo Fernández Blanco hace hincapié en el reclamo de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la Argentina (Cecha), quienes acusan a la gestión actual de YPF de mantener “los principales lineamientos comerciales” que aplicaron Repsol y el Grupo Eskenazi, los cuales dejaron al sector en una “situación crítica”. En segundo plano, el diario centenario anuncia que “Empezó con buena demanda el bono de la petrolera para minoristas”.