Clarín, La Nación y El Cronista enfatizan la situación que se produjo ayer en Buenos Aires. Página y Ámbito prefieren seguir atentos al triunfo de Obama en los EE.UU. El 8N no logra despegar.
Las altas temperaturas vienen siendo las grandes protagonistas de la primera semana de noviembre. A propósito, el apagón de ayer en Buenos Aires –a raíz del colapso energético por el calor– amortigua la expectativa mediática con respecto al 8N y los denominados “cacerolazos”. La reelección de Barack Obama sigue convocando a los matutinos porteños y también atenta, de alguna forma, contra las protestas de hoy por la noche.
“Hubo tres horas de caos por un enorme apagón”, realza Clarín en su título insignia. En la bajada explica que ayer la térmica alcanzó los “36,7°” y que por el “récord” de consumo eléctrico, varias estaciones de Edenor y Edesur “salieron de servicio”. Al mismo tiempo, apunta que “3 millones de personas” estuvieron afectadas y que “el tránsito colapsó” porque tampoco hubo semáforos. El diario no sólo edita el asunto como su “Tema del día”, sino que le dedica unos dos tercios de su primera plana.
La Nación se acopla a su colega y registra en lo más alto: “Dos horas de infierno y caos en la ciudad por un gigantesco apagón”. Más abajo señala que “dos cables de alta tensión salieron de servicio” y coincide con Clarín al describir que “3 millones de personas” se vieron afectadas. Agrega que con “35°” y en “hora pico”, tampoco hubo “subtes y trenes”.
Ambos matutinos le dedican sus fotos centrales al “caos” por el “apagón”: Clarín muestra la “madeja de vehículos” en el barrio porteño de Retiro y La Nación, la “insólita” postal del Congreso de la Nación a oscuras. Ambos agregan que anoche “seguían los cortes”.
Asimismo, El Cronista imita a los dos diarios más vendidos del país con su título: “Un gigantesco apagón hizo colapsar la Ciudad y expuso la crisis del sistema eléctrico”. Al igual que sus colegas acentúa el “caos” del tránsito por los cortes de semáforos y de subtes. Desde segmentos secundarios, Página/12 enfatiza que los “cuatro jinetes del apocalipsis galoparon por Buenos Aires” –por el “calor, el apagón, la acumulación de basura y el caos de tránsito”–. A diferencia de sus colegas, anota que hubo “medio millón de personas” que se vieron afectadas por el corte de luz. Se suma Ámbito al hablar del “colapso”.
Por otro lado, Obama sigue pisando fuerte en la cartelera porteña. Página estampa: “Renovación y cambio”. En la bajada, reconoce que el presidente de los Estados Unidos “renovó su mandato como expresión de los cambios en la sociedad norteamericana, el ascenso de posturas liberales como el matrimonio igualitario y la legalización de la marihuana (que se impusieron en varios estados) y el nuevo peso de afroamericanos y latinos”.
“Obama sin paz; Wall St. se hundió; temor total”, anota Ámbito al plantear que los mercados “le dieron la bienvenida” al reelecto presidente con “la mayor caída del año” en la bolsa estadounidense. Prevé que el país del Norte podría entrar en “recesión”. Se acoplan La Nación, a través de un título secundario ubicado al pie de su sábana principal, y El Cronista.
La expectativa por las protestas de hoy a la noche (8N) quedan relegadas a un segundo plano. La Nación apunta la “preocupación” del Gobierno en su título secundario más notorio. En Página destacan la convocatoria del jefe porteño Mauricio Macri y analizan la “espontaneidad” de la convocatoria. El Cronista hace foco en los “duros cruces” entre oficialistas y opositores.
En menor medida, La Nación y Ámbito resaltan que se “derrumbaron” las ganancias de YPF. Los dos matutinos más vendidos relegan a Arsenal, que ayer venció a Boca por penales y se consagró campeón de la Supercopa Argentina.
Los efectos del apagón energético que afecto a la Ciudad y al Conurbano bonaerense copan las portadas de Crónica y Popular, que le otorgan el mismo enfoque protagónico que Clarín, La Nación y El Cronista. “Colapsó la Ciudad”, distingue Crónica que prefiere fustigar a Mauricio Macri porque “mientras todo era un caos, presenció el recital de Kiss”. Popular se suma al imprimir: “La Ciudad fue un caos por enorme apagón”. Difiere de los dos matutinos más vendidos del país porque habla de “un millón” de afectados por los cortes de luz. Además, subraya que “para colmo, la Capital sigue tapada por la basura”.
Las tapas también se pintan de celeste y rojo por la nueva coronación de Arsenal, que luego de empatar 0-0 en el tiempo reglamentario, superó a Boca por penales (4-3) y se consagró campeón de la primer Supercopa Argentina. En menor medida, informan que Cristina Fernández “saludó” a Barack Obama luego de su triunfo.
Analizan la victoria de Obama y sus próximos desafíos en un país “dividido”
Entre las noticias internacionales, la reelección del presidente de EE.UU., Barack Obama, sigue ostentando un protagonismo casi excluyente entre los matutinos porteños, que la atraviesan desde diversos ejes. Apuntan así las reacciones del reelecto mandatario y su contrincante republicano Mitt Romney. Además, analizan las causas de la victoria del mandatario demócrata y la derrota de su adversario. Asoman también anticipos sobre los próximos pasos de Obama y la relación de fuerzas en el Congreso estadounidense. Entre otros ejes, se destacan el impacto económico del triunfo del primer presidente afroamericano, y las repercusiones en la Argentina y la región.
A través de la corresponsal Ana Barón, Clarín arranca la sección “El Mundo” destacando el festejo de Obama, que extendió “la mano a los republicanos”, ya que “escuchó la voz de aquellos que no lo votaron” y que dejaron en claro que el país “sigue profundamente dividido”. Entre las causas de la reelección, la enviada especial Paula Lugones sostiene que “Los hispanos y las mujeres fueron claves para el triunfo demócrata”. El diario de la familia Noble añade además el editorial del diario The New York Times, en apoyo al reelecto mandatario; y a través del británico The Guardian, enumera los “Momentos insólitos de una larga campaña electoral”.
La Nación arranca desde el pie de su portada el artículo “Después de la victoria y la euforia, Obama ya enfrenta desafíos urgentes”. El enviado especial, Guillermo Idiart señala así que “la primera advertencia vino de Wall Street, que cerró su peor sesión del año”, a pesar de su “mensaje conciliador” para con los republicanos. Pero también registra una “división sin cambios” en el “balance de poder” en el Congreso. En este sentido, la corresponsal Silvia Pisani entiende que el resultado de los comicios fue una “‘consagración del statu quo’”; y en otro artículo, analiza las “debilidades y fortalezas” de Obama para su nuevo mandato. Luego, Guillermo Idiart pone la lupa en los republicanos, quienes se preparan para una “puja interna”; mientras que Rafael Mathus Ruiz distingue el apoyo al reelecto mandatario por las “minorías”: “voto hispano y negro” y de “mujeres y jóvenes”.
Para su título central de tapa, Página/12 elige destacar “Renovación y cambio”. Al interior, bajo el cintillo “Otra vuelta de Obama”, el enviado especial Ernesto Semán, entiende que la victoria demócrata se debió a los “profundos cambios sociales” que generaron las políticas del presidente, aún en un “país partido”; lo que demuestra una “base política socialmente heterogénea de trabajadores y clases medias apoyando propuestas políticas seculares y pluralistas”. Señala además que, para los republicanos, “La culpa es de Sandy”. Entre las opiniones, sobresalen las del escritor chileno Ariel Dorfman (“La tormenta de Obama”), las del presidente del Laboratorio de Políticas Públicas, Gabriel Puricelli “Un lugar para América Latina”; y las del politólogo Atilio Borón (“Malo, pero no el peor”).
En Ámbito, el enviado especial Sebastián Lacunza expone el próximo desafío de Obama: lograr que el Congreso apruebe “la reforma del esquema impositivo”. Coincide en destacar que las “minorías” fueron “claves” para el triunfo de Obama, y que Bill Clinton, fue su “arma secreta”. Entre las primeras medidas del reelecto mandatario, distingue que la “reforma migratoria” tiene la “‘prioridad’”.
Desde Washington, el director periodístico de El Cronista remarca que “Obama resistió el desafío electoral”, con el apoyo de “jóvenes, mujeres, negros y latinos” y por el impacto del huracán “Sandy”. En este sentido, la editora de Internacional, María Oliva, entiende que todavía existe una “asignatura pendiente con los latinos”.
Se fijan en la Presidenta por saludar a Obama
Tras la reñida elección del pasado martes, que extendió el gobierno de Barack Obama por cuatro años más, los matutinos porteños acentúan que Cristina Fernández le envió una carta formal para “felicitar” o “elogiar” al reelecto mandatario estadounidense y que también hizo el análisis de la votación a través de Twitter.
En Clarín subrayan que la mandataria nacional, en la red social del microblogging, “confundió la cantidad de electores con el número de votantes”. En sintonía con La Nación, también remarca que la Presidenta “criticó a los medios” –principalmente a las cadenas de TV– por “manipular y mentir” al publicar sondeos. Martín Dinatale agrega en el diario centenario que la Casa Rosada vivió la votación con “indiferencia”. Página/12 y Ámbito se concentran en la carta enviada a Obama y El Cronista edita una suerte de justificación para la mandataria nacional porque aclara que finalmente “la paridad electoral no estuvo ni cerca de cumplirse”.
Por otro lado, Laura Bonilla escribe en Ámbito que “América Latina espera que Obama mire hacia el sur”. En tanto, Silvia Ayuso entiende que la región “sigue lejos de las prioridades” del gobierno estadounidense. Por si fuera poco, el exembajador en la OEA, Rodolfo Gil, remata: “Argentina no figurará en la agenda de Washington”.
Ámbito jerarquiza el impacto de reelección en Wall Street
A diferencia de sus colegas, Ámbito Financiero jerarquiza en el techo de su portada el impacto negativo de la reelección del presidente de EE.UU., Barack Obama, en la bolsa de Wall Street; con una caída del 2,4 por ciento, lo que se traduce en un “temor total” por el “abismo fiscal” que afronta dicho país. El Cronista lo sigue desde un minúsculo espacio en su tapa.
“Mercados saludaron a Obama con una caída del 2,4% en Wall St.” presenta Ámbito Financiero en la plana 3. Allí, explica que “los inversores centraron sus preocupaciones en cómo solucionará el ‘precipicio fiscal’ que afronta EE.UU.”, sobretodo por la “fragmentación” que presenta el Congreso de dicho país. Al entrar en detalles, agrega las fuertes bajas en la bolsa neoyorkina “se cebaron especialmente con los sectores que habría favorecido Romney de haber llegado a la Casa Blanca”: “bancario”, “defensa” y “energético”.
En la tapa de Finanzas & Mercados, El Cronista alerta que “Wall Street se asoma al abismo fiscal: tuvo peor caída desde noviembre”. En este sentido, el diario salmón amplifica el “temor” de los inversores a la “dura negociación” que deberá afrontar Obama en un Congreso “dividido” para “reducir el déficit fiscal”; lo que incluye un “aumento de impuestos” y el “recorte de gastos” en US$ 600.000 millones.
En Clarín, la corresponsal Ana Barón también destaca “El ‘abismo fiscal’, la amenaza que está a punto de corporizarse”. Así, anticipa que si los legisladores demócratas y republicanos no llegan a un acuerdo para reducir el déficit antes de fin de año, “comenzará automáticamente una serie de recortes de gastos y aumentos de impuestos muy drásticos”; lo que generaría una “caída de 3% del PBI en el 2013 lo que arrojará al país a una nueva recesión”. De esta forma, la periodista anticipa que el “problema es que para logarlo (el acuerdo) el presidente necesita el voto de los republicanos que dominan la Cámara de Diputados, incluyendo a los legisladores del fundamentalista Tea Party que han venido bloqueando todo tipo de acuerdo que incluya un aumento de impuestos”.